Hn. Raquel Torres A.
En Memoria
DATOS BIOGRAFICOS DE LA HNA. RAQUEL
En el año de 1930 en Zitácuaro Michoacán, nace del matrimonio de José Torres y Ofelia Alvarado una hermosa niña a la cual registraron con el nombre de Raquel Torres Alvarado.
Raquelito asistió a la Iglesia desde su temprana edad y conoce a Cristo como su salvador personal.
Iglesias a las que asistió y fue miembro.
Iglesia Getseman de Zitcuaro Mich.
Iglesia Príncipe de paz, en el D.F.
En Zapopan Iglesia Bautista Bíblica Calvario
En Saltillo Coahuila iglesia Calvario.
Regresa Zapopan y nuevamente esta en la Iglesia Bautista Calvario más o menos en 2011.
Nuestra Hna. Raquel un sábado por la tarde del año 1992 llega a nuestra iglesia preguntando por los horarios de los cultos. En esta ocasión Jacob Barrón Carrillo, le dio la bienvenida mientras su papa el pastor Waldo Barrón Pérez, llegaba y ella decidió esperar mientras el coro ensayaba. Jacob expreso que la observo que ella estaba muy atenta viendo y escuchando el ensayo, Jacob nunca pensó que la hermana Raquel iba ser una gran bendición para su vida y para muchos de la Iglesia Y es así como comienza una vida de testimonio para nosotros, de parte de nuestra hermana. Era entusiasta participo en dramas, recitaba, en varias ocasiones para programas especiales de nuestra Iglesia. Memorizaba capítulos de la Biblia y participaba en los concursos de memorización de la palabra de Dios, enfrentándose a la juventud y esto era de gran testimonio, pues ellos veían que a su edad participaba y les servía de ejemplo. Tuvimos en gozo de conocer a su mama, la hna. Ofelia Alvarado, nuestro coro de niños fue a cantar a su casa. También tratamos muy de cerca a Ofelia hija, a su esposo Gustavo, estos últimos meses nos frecuentamos con ella, siempre recibiéndonos con mucho amor. Visitaba a los enfermos, ella estuvo en Toluca y visito a mi mama le dio palabras de aliento. Jamás lo olvidare. Siempre tubo una palabra muy especial en los momentos difíciles, el día que choco Israel y Eli ella venia con ellos, y cuando yo llegue y mire para todos lados, sin saber que hacer, se acerco y me dijo: Estamos bien, pero, ¡ya esta el molito de olla!, y recuerdo que me saco del problema y sonreí. Hna Raquel siempre pensó en su pastor, siempre lo procuro, preguntaba cuando era su cumpleaños, ahora lo, van a saber ella preparo desde su lugar dos reconocimientos para el hno. Waldo, recuerdan que se le han entregado dos placas, pues ella era la iniciativa. Y siempre salía todo bien. La hermana Raquel nunca fue una hermana que busco ser reconocida Siempre presta para las necesidades de la iglesia. Con Ofelia preparaba platillos para la cena de navidad, para las ocasiones especiales siempre ofrecía algo especial. El día 2 de marzo ella llego al culto acompañada de Ofelia, tal, parecía que venia a despedirse de todos. Platico, estrecho las manos de cada uno de nosotros y aun todavía estuvo con nosotros aquel día por la noche, Se veía feliz. Nunca imaginamos que estaba a escasas horas de su enfermedad, no lo podemos creer, pero así fue.
La hermana Raquel deja un hueco muy grande en nuestra congregación y un gran testimonio para seguir.
Mi pregunta, ¿Quién de ustedes, le gustaría ocupar su lugar?
Seguir su ejemplo, seguir realizando paso a paso sus actividades.
Yo por lo pronto.
¡Quiero ser como ella!
